Las 7 Maravillas del Mundo Moderno
Las 7 Maravillas del Mundo Moderno
En 2007 un concurso público e internacional escogió las 7 Maravillas de todo el mundo Moderno. Cuya elección, en la que participaron más de 100 millones de personas repartidas por todo el planeta, estuvo rodeada de mucha polémica, ya que no fue apoyada por organismos oficiales como la propia UNESCO y en las que hubo muchísimas candidatas y también muchas sorpresas finales.
Los triunfadores y merecedores del título han sido:
La estatua de Cristo Redentor
Esta enorme efigie de Jesús de Nazaret, situada 791 metros sobre el nivel del mar, en la cima del cerro del Corcovado, en la ciudad brasileña de Río de Janeiro, mide treinta coma uno metros y pesa más de mil toneladas.
Su construcción se inició en 1926 como conmemoración por los 100 años de la independencia de Brasil, siendo finalmente inaugurada el 12 de octubre de 1931. Los autores de la misma fueron el escultor francés Paul Landowsky, que se encargó del diseño y ejecución del cuerpo y el escultor de origen rumano Gheorgue Leonida, que se ocupó de la cabeza y el rostro.
En este sentido, esta escultura está considerada como uno de los grandes hitos de la ingeniería contemporánea, debido a la compleja orografía del lugar donde se levanta el reducido tamaño de la base sobre la que se tuvieron que colocar los andamios y el hecho de que ningún trabajador falleció en el proceso.Aunque les parezca sorprendente, en aquellos tiempos, el número de personas que morían en las obras era preocupantemente alto.
Además, está considerado un ícono del movimiento artístico Art Déco, que hoy en día es uno de los mayores atractivos turísticos de Brasil, así como un lugar de culto y peregrinación para la gran comunidad cristiana que reside en ese país.
El Taj Mahal
El Taj Mahal, que en hindi significa literalmente Corona de los palacios, es un monumento funerario que tardó en construirse más de 23 años, concretamente entre 1631 y 1654, y que está reconocido como patrimonio de la Humanidad desde 1983.
Localizado en la ciudad india de Agra, a orillas del río Yamuna, fue levantado por orden del emperador Shah Jahan de la dinastía Turko islámica mongola para honrar la memoria de su esposa Muntaz Mahal, que falleció durante el nacimiento de su décimo cuarta hija.
Su arquitecto principal fue Ustad Ahmad Lahory y para levantarlo se necesitó el trabajo de más de 20 mil obreros. Contrario a lo que se piensa, el Taj Mahal no está compuesto solo por el imponente mausoleo de más de 35 metros de altura de mármol blanco con cúpula globular que se suele conocer en la cultura popular, sino que está formado por un conjunto amurallado de edificios entre los que destaca una mezquita.
Varias estancias de invitados y numerosos jardines que ocupan la nada desdeñable cifra de 17 hectáreas. Esta joya del arte musulmán descrita a principios del siglo XX por el poeta hindú Rabindranath Tagore como una lágrima en la mejilla del tiempo.
Es considerada por muchas personas como una de las mayores demostraciones de amor que han existido en la historia.
Sin embargo, en torno a este lugar también existen algunas leyendas más oscuras que narran como a muchos de los mejores artesanos y escultores que trabajaron allí, se les mutiló y se les cegó adrede para que en un futuro no pudiesen volver a participar en la construcción de ningún otro edificio que pudiese rivalizar con la belleza y majestuosidad del propio Taj Mahal.
Chichen Itzá
Este impresionante yacimiento arqueológico, situado en el Estado mexicano de Yucatán, debe su nombre a la enigmática y fascinante cultura maya.
De hecho, en esa lengua la maya Chichén significa Boca del pozo Aïcha de los brujos del agua. Por este motivo, los investigadores creen que se trató de algún tipo de ciudad sagrada o centro de culto fundado en torno al año 525 después de Cristo, cual se desarrolló en numerosas etapas en las que sufrió la influencia continuada de los diferentes pueblos y culturas que lo habitaron a lo largo del tiempo.
Las imponentes ruinas que hoy pueden ser visitadas, en las que se observa una clara influencia de la vecina cultura tolteca, pertenecen al período encuadrado entre los años 800 y 1100 después de Cristo, destacando sobre las demás dos lugares concretos.
El primero de ellos es la pirámide, situada en el centro del yacimiento, que mide 30 metros y tiene cuatro escalinatas de 91 escalones cada una con la plataforma superior suman un total de 365.
Además, está consagrada al dios Kukulcán, que es a su vez la representación maulla del dios Quetzalcoatl, la serpiente emplumada, deidad considerada por muchos historiadores como una de las principales del panteón de las culturas mesoamericanas prehispánicas.
Y en segundo lugar, destaca el Observatorio Astronómico del Caracol, que es importante por la gran relación existente entre la localización y orientación de su construcción y diferentes eventos como los solsticios y las órbitas alrededor del sol de algunos planetas como Venus.
Algo que ha venido a demostrar y confirmar los avanzados conocimientos en el campo de la astronomía de la civilización maya.
Por último, cabe decir que desde 1988 también es considerado por decisión de la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.
El Coliseo de Roma
El imponente anfiteatro Flavio, que tardó ocho años en construirse, fue iniciado en el año 72 después de Cristo, bajo el mandato del que comenzó la dinastía Flavia. El emperador Vespasiano y completado en el año 80 durante el gobierno de su hijo Tito.
Sin embargo, a este anfiteatro se le conoce más coloquialmente como coliseo, denominación que probablemente tenga su origen en la proximidad de este edificio a la colosal estatua de más de 30 metros que representaba al fallecido emperador Nerón y que, por desgracia, no ha llegado hasta la actualidad.
Cabe decir que este lugar fue utilizado para muchos fines, como por ejemplo espectáculos de gladiadores. Luchas contra bestias salvajes, obras de teatro clásico, etcétera. Actividades que se extendieron durante más de 500 años, concretamente hasta el siglo 6, fecha en la que se celebraron los últimos juegos en él por orden del rey godo Teodorico.
Desde ese momento fue reutilizados como refugio primero, como fortaleza después y en último lugar como cantera. Sí, como cantera, pues de él fueron arrancados y se extrajeron durante muchos años gran cantidad de piedras y bloques de mármol que fueron reutilizados para la construcción de otros edificios de la ciudad, expolio que se detuvo cuando, por orden del papado, se convirtió en sede religiosa.
En los primeros tiempos del cristianismo, evidentemente el aspecto actual no se corresponde ni de lejos con la grandeza que tuvo sus días de gloria.
Pero pese a esto, siga siendo uno de los mayores símbolos de la grandeza del Imperio Romano, motivo por el cual, casi 2000 años después de ser inaugurado, sigue siendo admirado por todo el mundo.
Machu Picchu
Machu Picchu, que lengua quechua es traducido como Montaña Vieja, fue redescubierto por casualidad en 1911 por el profesor estadounidense Hiran Binghan, mientras buscaba la mítica ciudad inca perdida de Vilcabamba.
Este emplazamiento está situado en una cadena montañosa de más de 2400 metros de altura, en el conocido como Valle Sagrado de los Incas, a unos 80 kilómetros de la ciudad peruana de Cusco. Pese a la teoría que sitúa su antigüedad en torno al siglo 15, el análisis de muchas de sus construcciones y el evidente carácter ceremonial de la principal vía de acceso al lugar parecen demostrar su existencia desde bastante tiempo antes.
Dicho esto, los arqueólogos coinciden en que su época de esplendor se vivió durante el gobierno del noveno rey inca Pachacútec, que lo usó como sede palacio. Y probablemente también como santuario religioso.
También es considerado como una obra cumbre de la arquitectura, la ingeniería prehispánica por la enorme complejidad de su construcción. En la que destaca el uso en propio beneficio sobretodo defensivo de la escarpada orografía donde está encuadrado.
Además de sus peculiares características arquitectónicas y paisajísticas. Y el velo de misterio que se ha formado a través del tiempo a su alrededor por las innumerables leyendas que sobre él existen.
Machu Picchu se ha convertido en uno de los yacimientos arqueológicos más visitados del planeta, así como uno de los reclamos turísticos más importantes de Perú y de toda América Latina.
Petra
Localizada en Jordania, petra que en griego significa piedra, fue la antigua capital del reino Nabateo y hoy en día es uno de los enclaves arqueológicos más importantes del mundo, siendo sus emplazamientos más célebre el Khazné conocido como el tesoro y el Deir, conocido como el monasterio.
Construcciones labradas en la misma piedra del valle que reciben el nombre hemispeos, término también de origen griego que alude a los lugares arquitectónicos que tienen una fachada principal decorada y un espacio interior excavado en el interior de la roca.
Según los arqueólogos e historiadores, ésta fue fundada hacia el final del siglo VIII antes de Cristo por los edomitas, pueblo situado al sur del Mar Muerto, y fue ocupada en el siglo 6 antes de Cristo por los ya mencionados Mateos que la hicieron prosperar gracias a su situación privilegiada en la ruta de las caravanas en las que se comerciaba con el incienso, las especias y otros productos de lujo entre Egipto, Siria y Arabia y el sur del Mediterráneo, conquistada por los romanos en el siglo 1, siguió siendo un enclave importante para los sucesivos imperios de la antigüedad.
Sin embargo, hacia el siglo 6, después de Cristo, el decaimiento generalizado de las actividades comerciales y la sucesión de varios terremotos terminaron por condenarla al abandono y al olvido.
Un olvido que se prolongó hasta inicios del siglo XIX, cuando el explorador suizo Juan Luis Burjasot la descubrió para el mundo de nuevo.
Como curiosidad final, se estima que hoy en día sólo está excavado en torno al 20 por ciento de todo el solar que ocupaba la ciudad original, que quedó sepultada por las continuas tormentas de arena, inundaciones por lluvias torrenciales. Y como ya he comentado antes, la acción destructiva de los sismos que azotan periódicamente esta zona del planeta.
La Gran Muralla China
La Gran Muralla China, Patrimonio de la Humanidad desde 1987, de la que se conserva actualmente en torno a un 30 por ciento y que se extiende a lo largo de más de 21 mil kilómetros, repartidos en varias secciones desde la frontera con Corea hasta el desierto del Gobi.
Puede ser considerada en su conjunto, sin lugar a dudas, como una de las mayores, si no la mayor obra de ingeniería de la historia de la humanidad. Ésta fue construida y reconstruida en diferentes fases distribuidas entre su inicio en torno al siglo 5 antes de Cristo y hasta su finalización en el siglo XVI, con el objetivo de servir como protección en la frontera norte de China contra los ataques de los enemigos imperiales, como los ejércitos mongoles o los pueblos nómadas de Manchuria.
Cabe decir que este lugar para los ojos occidentales no fue descubierto hasta el año 1605, cuando el explorador jesuita portugués Bento de Gois, gracias al permiso expreso de las autoridades chinas, se convirtió en el primer europeo de la historia en poner un pie sobre ella con respecto al número de personas que trabajaron en su construcción a lo largo de más de 2000 años.
No existen apenas registros, aunque algunos expertos sitúan la cifra entre 800000 y un millón de personas repartidos entre ingenieros, obreros y prisioneros, de los cuales se estima que murieron más de 400000 durante el proceso, existiendo leyendas algo turbias que afirmaban que en muchas ocasiones se usaron sus huesos como cimientos, hecho que las investigaciones arqueológicas han desmentido por no haber encontrado ningún indicio físico que lo corrobora.
A día de hoy es uno de los lugares más icónicos y turísticos del mundo, ostentando el récord desde 2014 de ser el monumento más visitado del planeta en un mismo día, con una cifra superior a los 8 millones de personas.
Y con esto hemos llegado al final del recorrido, en el cual hemos aprendido muchas cosas.
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Y Si como seguro estarás pensando, muchos edificios y lugares icónicos repartidos por todo el mundo se han quedado fuera. Como por ejemplo la Torre Eiffel de París, la Alhambra de Granada, Angkor Wat en Camboya, la Torre de Pisa, el Valle de los Reyes en Egipto o Santa Sofía en Estambul.
Sin embargo, nos guste más o nos guste menos, éstas que hoy te he narrado fueron las elegidas.